domingo, 7 de diciembre de 2008

Lo que pasó, pasó...



¿Hay alguna diabólica razón para viajar una hora y cuarto en un transporte público al ritmo del reggaeton (también reggaetón y reguetón según wikipedia)?


¿Sólo porque un individuo está estrenando su celular con mp3?

¿Sólo porque además tiene cara de malo?


¿Sólo porque me da miedo sugerirle que baje el volúmen?

Sí, claro. Supuse que no iba a ser un sujeto amigable y comprensivo conmigo.


Increible.





NO A LOS CELULARES CON MP3.


NdeB.: No tengo idea si el equipo de la foto cuenta con mp3. Se entiende la idea de todas formas. Sí, se entiende.







Me pintó en este domingo Portishead. Enjoy.
Buen feriado...

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Ojalá que llueva café...

Decidí entrar a Bonafide. Tenía que leer, quería un lugar tranquilo y ameno. Amigable, y digo amigable porque es conocido, porque todos tenemos un Bonafide cerca. Juro que no me están pagando por hacerles publicidad. Sigo. Preferí entrar ahí en vez de sentarme en anónimos bares de calles con números que no me sientan bien. Un café, un alfajor y un chocolatito en el plato me hicieron sentir cerca de casa. Escuchar a la moza preguntando - ¿Dulces o saladas? en vez de -¿de grasa o manteca? me recordaron la distancia y estuve próxima a la crisis. Ya saben que soy exagerada, pero es bueno aclararlo. Lo cierto es que me devolvió un rayito de luz y algo de paz el ruido de la maquina de café. Lo estaban moliendo a un metro mio. Me embriagué de ese aroma un ratito imaginándome durmiendo entre granos de café. Un extasis momentaneo escapando de la realidad. Esa realidad que llegó cuando nuevamente escuché el ruido de la maquina, y se tornó molesto para leer y concentrarme. Sí, mis contradicciones y yo.
Pasó noviembre, diciembre también es jodido.
Quería saludarlos...nos estamos viendo.